Se reactiva la industria petrolera

Los años siguientes, 1979 a 1983, reflejan la reactivación producida en la industria petrolera, debido a la promulgación de la “Ley de Contratos de Riesgo”. Esta circunstancia le dio una nueva dinámica a la actividad de exploración y producción, lo que se tradujo en un crecimiento progresivo del CPBA, tanto en la asistencia a los regulares almuerzos de los segundos y cuartos martes de cada mes, como en la incorporación de nuevos socios que llegaron a sumar 343, al 31 de diciembre de 1983.

Las reuniones crecieron de acuerdo a la importancia de las personalidades que fueron invitadas especialmente. Entre ellas figuran la del Ministro de Economía Dr. José Martinez de Hoz, el Secretario de Energía Ing. Daniel Brunella y el canciller Dr. Niconor Costa Méndez, que se refirió al conflicto argentino-chileno por el canal de Beagle. Dentro de su ilustrada presentación ya se detectaron algunos conceptos premonitorios al suceso Malvinas que ocurrió un año más tarde.

En 1982 disertaron, ante un nutrido y entusiasta grupo de socios, el Premio Nobel Dr. Federico Leloir, el filósofo Dr. Jorge García Venturini, el físico nuclear Castro Madero y los petroleros Dr. Arturo Sábato y Juan M. Bustos Fernández.

Es digno recordar que en abril de 1982, el país se vio sacudido íntimamente por una gesta inesperada: la recuperación de las Islas Malvinas. Todo el pueblo argentino se movilizó solidariamente. El Club estuvo presente en esta dolorosa circunstancia haciendo llegar a la cuenta especial del Banco de la Nación una donación de 45 millones de pesos, destinadas al “Fondo Patriótico Malvinas Argentinas”.

Las reuniones deportivas continuaron atrayendo a muchos socios y amigos, golfistas y tenistas, que disputaron importantes torneos en los campos de deportes del Club Hurlingham, Los Lagartos Country Club y San Andrés Golf Club. También se disputaron, en 1982, en las instalaciones deportivas de Dálmine Siderca de Campana y en la quinta particular del Ing. Fuentes, dos torneos de fútbol.

Como broche de fin de año, se realizó una cena y baile en el salón Libertador CM Sheraton Hotel. Las 612 tarjetas vendidas hablan de la gran concurrencia.

Dejando de lado los tradicionales almuerzos, fiestas y torneos, cabe destacar algunos acontecimientos y actividades que salieron de lo común. Desde el año anterior la Comisión Directiva había decidido llevar a la realidad un viejo anhelo de los miembros del Club: la compra de una Sede Social. Así fue como a poco de hacerse cargo la citada Comisión, presidida por el Ing. Eduardo Rocchi, se solicitó a todos los socios una contribución extraordinaria.